miércoles, 23 de noviembre de 2011

El temor de un hombre sabio

Tan solo llevo cinco días leyendo esta maravilla, ya he pasado la página 300, aun me quedan otras 890, saboreo cada palabra, dejo de estar en al tierra, me traslado hasta la Universidad, El Eolio, Imre.. Dejo de existir como yo misma , ahora soy Kvothe,  vivo y siento lo que él. Me da pena leer, no quiero terminarlo. Y cuando me aparto de mi libro, aun sigo pensando bastante rato como Kvothe y sigo viviendo en Las Cuatro Esquinas de la Civilización.
Llevaré esta historia siempre dentro de mi, la guardaré como un tesoro. Pues ya forma parte de mí.

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